Pacientes con trastornos alimentarios construyen y programan un robot en un taller de la Politécnica

Publicada el 25.May.2017

El profesor de Ingeniería Electrónica de la Universidad Politécnica de Cartagena Juan Suardíaz y la asociación de estudiantes UPCT Maker, experta en impresión 3D, han impartido a pacientes de la Unidad de trastornos en la conducta alimentaria del Hospital Reina Sofía de Murcia un taller de programación robótica y modelado dentro del proyecto #IngenioSanos de la UPCT en las Aulas Hospitalarias.

En el taller, de 12 horas de duración, los jóvenes pacientes han construido su propio robot personalizado, aprendiendo a diseñar e imprimir las piezas mecánicas del pequeño androide y a programar su unidad de control, utilizando software abierto y un kit robótico de bajo coste.

“Les ha venido genial a nivel anímico para su autoestima y es una gran oportunidad de formación que quedará en su currículum”, resalta Ana Ferrer, responsable de las Aulas Hospitalarias. El taller ha despertado también el interés del personal sanitario del hospital. “Aquí todos queremos ser ingenieros”, asegura la profesora, que espera que el próximo curso pueda volver a realizarse también en las nuevas aulas hospitalarias de La Arrixaca.

#IngenioSanos en un proyecto coordinado por Juan Suardíaz en colaboración con la Unidad de Cultura Científica y de la Innovación de la Politécnica de Cartagena, con la colaboración de la Fundación Española para la Ciencia y la Tecnología - Ministerio de Economía, Industria y Competitividad (FCT-16-11471), que se realiza junto al Equipo de Atención Educativa Hospitalaria y Domiciliaria (EAEHD) de la Consejería de Educación, Juventud y Deportes.

Además de este taller, durante todo el curso académico, divulgadores de la UPCT están realizando demostraciones científico-tecnológicas en las Aulas Hospitalarias de la Región de Murcia.

“La experiencia de #IngenioSanos está dejando la boca abierta a niños, padres y sanitarios. Los divulgadores de la UPCT se han volcado y han hecho un gran esfuerzo para que las charlas sean interactivos para que los pacientes se sientan ingenieros por un día”, cuenta Ferrer.