Investigadores agrónomos descontaminan el cauce del Guadalentín con el proyecto europeo Life+ Riverphy

El estudio preliminar ya realizado revela que algunos tramos superan en hasta diez veces los niveles de referencia de cromo en el sedimento del río

Publicada el 31.Oct.2014
Información relacionada:
31.oct.2014.- El Grupo de Investigación en Gestión, Aprovechamiento y Recuperación de Suelos y Aguas (GARSA) de la Universidad Politécnica de Cartagena (UPCT) comenzarán este trimestre a descontaminar el cauce del río Guadalentín, extrayendo el exceso de cromo en el subsuelo mediante la plantación de flora autóctona, como parte del proyecto europeo Life+ Riverphy.

Los investigadores agrónomos de la UPCT han caracterizado la contaminación de los 1,5 kilómetros de cauce a rehabilitar, en una zona conocida como los Sangradores, y han registrado niveles de cromo que en algunos puntos multiplican por hasta 10 los niveles de referencia de 66 miligramos por kilogramo de sedimento. Sondeos de hasta diez metros de profundidad en tres tramos distintos, un muestreo superficial en sesenta puntos y una campaña de tomografía eléctrica han revelado también la presencia de otros metales pesados como el cobre y el zinc también en el lecho del río, aunque en valores no especialmente altos.

El cauce está contaminado por cromo procedente de los vertidos de las industrias del curtido de piel, y de cobre y zinc de las granjas porcinas y de los fertilizantes utilizados en la agricultura.

“La contaminación penetra como máximo hasta un metro de profundidad, por lo que no llega hasta el nivel de las aguas subterráneas y permite el uso de la fitoextracción”, explica el investigador Raúl Zornoza. “Esta técnica de descontaminación consiste en la plantación de especies autóctonas de flora capaces de absorber los metales pesados y el exceso de sales del sedimento”, añade.

El proyecto Life+ Riverphy, con un presupuesto de 1,7 millones de euros y financiado al 50% por la Unión Europea, está liderado por la Dirección General de Medio Ambiente de la CARM, y también participa el Ayuntamiento de Lorca y la Confederación Hidrográfica del Segura. Con la ejecución del proyecto se reforestará cada año un tramo de 500 metros de cauce hasta 2017 con plantas autóctonas, que posteriormente “serán utilizadas como biomasa para generar energía; y las cenizas resultantes, usadas en la producción de cemento para conseguir un residuo cero”, detalla Zornoza.

Además de para la descontaminación del cauce, el proyecto servirá para restaurar comunidades microbianas, proporcionar cobertura vegetal al lecho y recuperar el valor paisajístico de la zona habilitando un sendero ambiental y realizando charlas de concienciación en centros educativos y asociaciones regionales. Toda la información del proyecto y sus progresos se pueden encontrar en su página web www.liferiverphy.eu, donde además se puede contactar con los organismos del proyecto para solicitar información, solicitar la realización de charlas o planificar visitas a la zona de actuación.

En la foto, el investigador José Alberto Acosta.